Cómo encontrar tu propia voz cómo profesor de yoga….cuando hace algunos años una experta en marketing me pregunto: “Susi, pero ¿por qué una persona te va a elegir a ti y no a los cinco profesores de yoga que hay a tu alrededor? ¿qué te diferencia a ti del resto de profesores de yoga?

Me quedé blanca.

No supe responder.

Y es que yo tengo claro que cada profesor, a través de su experiencia, termina encontrando su propia voz,  porque su manera de entender el yoga y su enseñanza va unido a su personalidad y en ese sentido todos somos únicos e irrepetibles.

Yo lo tengo claro pero….¿lo tienen claro los alumnos? ¿cómo se lo explicas? ¿cómo lo comunicas para que ellos tengan ocasión de “escogerte”?

Diferenciarte forma parte del proceso de permitir que brote tu propio entendimiento del yoga y tu propio método de enseñanza.

Al principio es inevitable que seas muy parecido a los profesores que te han formado, son los que te enseñan, te corrigen, y te moldean así que, aunque no quieras tus neuronas espejo hacen su trabajo: aprenden por imitación.

Sin embargo, a medida que vas creciendo es recomendable que vayas alejándote de esos paradigmas para ir encontrando el tuyo propio.

No es algo que ocurra de la noche a la mañana sino que es gradual y paulatino y ocurre, por supuesto, a través de dos vías:

• la propia enseñanza
• tu práctica personal donde tienes ocasión de experimentar lo que realmente te gusta

Un día decides que prefieres empezar “así” la clase, o dirigir de otro modo “tal” postura, o incluir “tal” detalle, o subir el ritmo en “tal” vinyasa, o terminar tu sesión así….y poco a poco vas encontrando tu propia manera, única y genuina, de dar clases de yoga.

Y empiezas a diferenciarte.

Pero todo no acaba ahí, sino que además, te gusta la idea de compartir tus conocimiento online, o a través  las redes y resulta que eres un crak enseñando yoga virtualmente, o descubres que te inclinas hacia una línea de enseñanza adaptada a 3edad con soportes o variantes, o te gusta más trabajar con grupos reducidos y prefieres enseñar de manera personalizada.

ENCUENTRA TU DIFERENCIACIÓN SIENDO GENUINO Y AUTÉNTICO

Tu voz, tu huella, tu estilo de enseñanza…es único, no habrá otro/a igual a ti. Cuando te das permiso para brillar te sientes realizada con tus clases y acuden los alumnos adecuados.

Pon voz a tu visión propia de la enseñanza, con lealtad, con rigor, pero con personalidad. Actualmente se gradúan cientos de nuevos profesores al año, comenzamos a ser muchos, y en ese sentido la diferenciación es importante…

Lo que dicen tus alumnos de ti te puede dar pistas, he aquí una de las mías:

Personalmente suelen hablar de mi voz, mi lenguaje…que consigo un delicado equilibrio entre clases enérgicas y dinámicas con atención a la respiración, con instantes dedicados al Ser, con raíz en la práctica interna…

Individualmente, no sin esfuerzo, acepté también que mi lado estratégico y virtual tenía una presencia potente en mi enseñanza. Me gusta ofrecer contenido online, me gusta llegar más allá de los límites físicos de mis clases.

Mi empeño online, mi visión, mi aporte, es también una fortaleza, nadie hace lo mismo a mi mismo nivel y eso me diferencia.

repito…¿qué te diferencia a ti como profesor? ¿cuales son tus fortalezas? 

La confianza es clave en esta pregunta, porque a veces nos sentimos demasiado inseguros para enseñar lo que nos nace…cambiemos la pregunta y dime…

¿cómo serían tus clases si no sintieras ese miedo o inseguridad?

Te dejo con esta profunda reflexión y espero que me cuentes en los comentarios qué sientes cuando te hago esta pregunta… vamos….desbórdate.

Y si quieres seguir profundizando, y muy en la línea de lo que estamos hablando, aquí te cuento cómo mejorar tu enseñanza de yoga con una sola pregunta.